Desde la publicación del artículo seminal de John Bruer en 1997, la posibilidad de aplicar los conocimientos de la Neurociencia a la Educación ha sido criticada en base a la dificultad práctica de establecer realmente el vínculo entre ambos dominios. Hasta no hace mucho, sin embargo, nadie dudaba del potencial de la Neurociencia para aportar a la Educación. No obstante, el investigador Jeffrey Bowers ha señalado recientemente que existen problemas que vuelven imposible el vínculo, por una razón fundamental y de principios. En esta ponencia presentaré las bases de los argumentos de Bruer y Bowers. En particular, mostraré que mientras la crítica de Bruer sigue siendo válida, la crítica de principios de Bowers es equívoca. Con tal objetivo presentaré el estudio longitudinal que estamos realizando con el fin de determinar si medidas de oscilaciones neurobiológicas o sus correlatos comportamentales son útiles con el fin de aumentar la especificidad en la predicción de las dificultades de la lectura. En concreto, presentaré los resultados de la primera fase del estudio longitudinal que consistió e n la aplicación de pruebas comportamentales a 438 niños de edad pre-escolar en Montevideo. Mostraremos que parte de la varianza en tareas de reconocimiento fonológico es compartida con tareas comportamentales basadas en componentes oscilatorios. La conexión entre los comportamientos que dependen de las oscilaciones y la lectura, inesperada desde una perspectiva puramente comportamental, pero predicha por la teoría neurobiológica, muestra que la Neurociencia, a través de sus teorías puede realizar aportes fundamentales a la Educación. Discutiré lo que falta para poder tender los puentes reclamados por Bruer.