En la escuela aprendemos a sumar, a enumerar los ríos capitales del mundo, a programar, a dibujar, a conjugar y a escribir sin errores de ortografía. Un elemento de la vida actual que queda relegado en toda la educación formal es como aprender a decidir en grupo, a consensuar, a trabajar en equipo; algo que es por supuesto de enorme importancia en el ejercicio de la democracia, en todas sus escalas y niveles. En esta charla contare nuestros primeros pasos en esta pesquisa, desarrollando experimento para entender en que escenarios y en que situaciones el debate converge a decisiones «sabias» y efectivas.